La Rebelión del Silencio: mayo 2009

Querido Profesor:

Soy sobreviviente de un campo de concentración.
Mis ojos vieron lo que nadie debería ver:
cámaras de gas construidas por ingenieros educados; niños
muertos por enfermeras capacitadas. Mujeres y niños asesinados y quemados por graduados universitarios.

Por lo tanto desconfío de la educación. Mi pedido es: ayúdenles a sus estudiantes a ser más humanos. Sus esfuerzos nunca deberán producir monstruos instruidos, psicópatas habilidosos, Eichmanns. Leer, escribir y aprender aritmética sólo es importante cuando sirven para hacer de nuestros jóvenes personas más humanas.”

Autor Desconocido

sábado, 23 de mayo de 2009

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